Si eres aficionado de algún equipo del futbol mexicano, o de la liga MX en general, seguramente has escuchado a alguien decir que “la liguilla es otro torneo”, refiriéndose a que el desempeño y las posiciones de los equipos en la temporada regular al final suelen no verse reflejados en los resultados de la etapa final del torneo. Frente a esta lógica, el recién terminado Torneo Clausura 2023 resulta ser una gran confirmación para este punto de vista, en el cual, a pesar de la gran temporada que tuvieron el Monterrey y el América (primer y segundo lugar del torneo respectivamente), la cual desde luego los posicionaba como amplios favoritos para llevarse el título, el equipo que terminó coronándose campeón fue el Tigres, quienes clasificaron por repechaje como séptimo lugar de la tabla y después de haber pasado por la dirección de 3 técnicos diferentes.

A pesar de lo contraintuitivo que puedan sonar este tipo de situaciones, la realidad es que son considerablemente recurrentes, pues desde que existe el formato de liguilla en México, sólo el 24% de los campeonatos ha sido ganado por el equipo que lideró la tabla general. Esto desde luego nos hacen cuestionarnos…

 

¿Qué sería del futbol mexicano si se conservara el formato de liga europea?

En el escenario hipotético de que la Liga MX premiara como campeón del certamen al equipo que lidere la tabla general, tal cual se hace actualmente en la mayoría de las ligas europeas, la distribución de los títulos sería la siguiente:

Como se puede observar en los gráficos anteriores, en el formato de torneo actual, el top 5 de equipos con más títulos se queda con el 48% de ellos, mientras que con el formato europeo ascendería a un total del 55%, es decir, se concentraría una mayor cantidad de títulos en la parte alta de este ranking. Por el contrario, al concentrarnos en la parte media de este ranking (del 6° al 10° lugar), podemos notar que la proporción de títulos disminuiría un 11%. En la parte baja del ranking, se puede ver que el formato europeo distribuiría los títulos entre una mayor cantidad de clubes, sin embargo, 2 de los 3 clubes que entrarían en esta distribución hoy ya no existen (Jaguares y La Piedad). De este modo, se puede entender que en efecto el formato actual de la Liga MX, realmente propicia una descentralización de los títulos y, con ello, una mayor probabilidad para los equipos menos regulares de obtener un título, lo cual conlleva también una mayor expectativa hacia el torneo para un segmento más amplio de seguidores.

¿Quiénes serían los más beneficiados o afectados por el formato europeo?

Frente a esta lógica, sólo hay 2 equipos de la actualidad que se habrían visto ampliamente beneficiados de este formato de torneo, los cuáles serían el Cruz Azul, que contaría con 14 títulos (5 más de los que ostenta actualmente) y el América, que tendría 16 (3 más que actualmente). En menor medida, se habrían visto beneficiados también equipos como el León, Morelia, San Luis y Tijuana (aunque solamente con un título más), sin contar a los ya desaparecidos Jaguares, Atlante, La Piedad, Morelia, Tecos y Veracruz.

Por el contrario, hay 7 equipos vigentes en la liga que se habrían visto disminuidos con esta alternativa de campeonato, comenzando por el Tigres, Santos, Pumas y Pachuca, que contarían con 3 títulos menos, Toluca y Necaxa con 2 menos y Atlas con 1 menos.

Ante estos datos, es evidente que el formato de Liguilla no solo genera mayor involucramiento de una proporción más grande de aficionados frente al cierre del torneo o la emoción de las eliminatorias a “matar o morir”, sino que también ha servido como método para que más equipos puedan entrar en la batalla por ver quién consigue más títulos y, que estos, no queden en manos de unos pocos.

Ante estos datos, se puede concluir que el formato de Liguilla tiene 3 grandes aportes tanto para las marcas de los equipos como para la marca de la Liga MX:

a). Aumento de la emoción en eliminatorias

No hay nada que llene más de emoción un partido de futbol que la posibilidad de ganarlo o perderlo todo en un solo juego, es bien sabido que las eliminatorias a “matar o morir” son un gran generador de emoción para los aficionados, lo cual naturalmente genera altos picos de rating en las televisoras encargadas de transmitir estos partidos.

b). Involucramiento de más aficionados en la etapa final del torneo

Para cualquier marca, aumentar el alcance de su producto es una meta más que atractiva. En el caso de la liga MX, el tener un formato en el que al final del torneo “todo pueda pasar”, hace que más aficionados se involucren con la Liga, lo cual representa desde luego una mayor derrama económica en merchandising, boletaje y publicidad.

c). Mayor descentralización de los títulos

Si bien puede sonar atractivo en un sentido estrictamente romántico, la realidad es que la descentralización de los títulos propicia también un aumento importante en el valor de todas las marcas involucradas en la liga, lo cual, desde luego, genera un círculo virtuoso de mayor posibilidad de inversión por parte de directivos y patrocinadores, aumentando por ende el atractivo y desempeño de todos los equipos y la liga en general.

 

 

Gustavo Casillas.